¡Hola! Soy  Kapirutxo.
Soy trovador.

Escribo, recito y actuó

Tangato 

Encontré un gato tanguero

taciturno y pensador

llorando en el basurero

un tango desgarrador.

Se largó la gata parda

y me dejó destrozao,

a otro gato dió su alma

y no me dijo ni miao.

¡Son los gopes de la vida!

¡Son los golpes del amor!

Vago por los callejones,

lo hago en busca de su olor,

olfateando los rincones

con nostalgia y con dolor.

¡Arrabales de la vida!

¡Arrabales del amor!

De milonga ya la ví

junto al que me la robó;

un gato con pedigrí

y algo mas fuerte que yó.

¡Arañazos de la vida!

¡Arañazos del amor!

Con la derota asumida

esa gata me dejó

grandes llagas en mi vida.

¡Arañazos del amor!

En las noches milongueras

cuando quema el corazón

con él me siento en la acera

y acompaño al bandoneón.

Kapirutxo


Rimar en kapirutxo es que el título

y la rima se parezcan mucho.

A veces ves (Kapilla)

A veces ves

Que has nacido de la nada,

en donde te tocó nacer.

No hay otra cosa que hacer.

Si toca en el mar, brazada,

si es en monte, una escalada.

A veces ves

que escalar nada te agrada.

Hay que llegar a la cima,

la cumbre te cae encima,

comprendes que esa embarcada

no la eliges, es forzada.

A veces ves

que te cuesta y que te apura

eso de siempre subir

solo por sobrevivir

y buscas una llanura

con buena agua y con frescura.

A veces ves,

y lo ves con alegría,

que se puede descansar

y tu mente refrescar

en la fuente de agua fría

que se llama poesía.

A veces ves

Que bebes de ese elixir,

Te recuerda de tu vida

la bajada y la subida

Quiero volver a vivir

Lo mejor de mi existir.

A veces ves

pasar el tren de la vida

sentado en una estación

sin encontrar la ocasión

de emprender un viaje de ida

cuando alguien te lo pida.


A veces ves

que el tiempo se va con prisa

sin saber lo que le queda,

siendo el mismo una moneda
cuya cara es la sonrisa
y la cruz quien te la pisa.

A veces ves

la vida color pobreza.

Un sueño negro, profundo,

presagiando el fin del mundo

con realidad y crudeza

que te hunde en la tristeza.

A veces ves

la miseria que a tu lado
se alimenta, vive y crece
y al verla así te parece
que por poco te has librado.
Esclavo privilegiado.

A veces ves

Que el amor se te hace esquivo

porque tienes un escudo

que se ha vuelto sordo y mudo

y no encuentras un motivo

de luchar y seguir vivo.

A veces ves

labios como amaneceres

que al hablarte te bendicen

con voz de amor y te dicen,

¿Me quieres o no me quieres?

¿Me quieres? Aquí me tienes.

A veces ves

soles que cuidan tu mente.

Faros que orientan tu nave,

que sienten todo y lo saben.

Ojos claros que no mienten

y su ternura la sientes.

A veces ves

El cariño de tu hermana

y amistad de mucha gente.

que luchando hacemos frente

con idea clara y sana

que de buena fuente emana.

A veces ves

el horizonte de un día

que nivela la balanza

con un brazo de esperanza

y canta con energía:

¡La ilusión no es utopía!

Kapirutxo

Título:

A veces ves

Rima:

a b c c b b

(a be ces bes)

— 

Los ojos de las flores

Diseño y maquetación: Agustín Satrústegui.

Diseño de portada: Pedro Irulegui.

Prólogo: Ángel de Miguel.

Epílogo: Juan Andrés Pastor.

Aportaciones literarias: Miguel Correas, Ángel de Miguel.

Michel Garrido, Iosu Moracho Cortés

y Miguel Ángel Irisarri.

Fotos: Agustín Satústegui (las no marcadas),

Pedro J. de Miguel, Aurelio Aransay, Charo Díez, Kike Ayúcar, Carlos García de Medinabeitia, Miguel Correas, Julián Ruiz Bujanda, Irati Casi, Pedro Irulegui, Iranzu Dupuy Sanz y en la sección Lectura de ojos , aportadas por las personas que los lucen.

Ilustraciones: Nicolás Jiménez y Sergio Miranda.

Ilustraciones en acuarela: Mertxe Satústegui " Satrus".

Caligrafía: Boni González. Carlos Torres y Mertxe Satrústegui.

Depósito legal: NA-0007/17

Número de Asiento Registral: 00/2017/700

Imprime: Gráficas Lizarra.

En esta página web se podrá escuchar el libro recitado

https://www.poegrafias.com/

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Índice

MORIR CON LA BOINA PUESTA

Ángel de Miguel.................................. 9

EL CARTERO DEL PRESIDENTE

Ángel de Miguel.................................. 11

ILUSIÓN............................................. 15

LECTURAS DE OJOS............................ 21

FLORES AL CORAZÓN......................... 37

ALMA................................................ 81

ESPERANZA....................................... 86

AGUA................................................ 91

A COSTA DE TUS ENTRAÑAS

Michel Garrido.................................. 94

RÍO SECO

Iosu Moracho Cortés......................... 98

AHORA NO TE DETENGAS

Miguel Correas................................. 102

ODA AL UREDERRA......................... 108

UREDERRAREN OLERKIA

Miguel Ángel Irisarri....................... 119

NANAS........................................... 125

EPÍLOGO

Juan Andrés Pastor......................... 130


LOS OJOS DE LAS FLORES

¿Cancionero?

No sé si seré poeta,

un amigo de los duendes,

si mi verso es solo letra

o el manar de alguna fuente.

Sobrevivo en esta tierra

y mi corazón me entiende.

Lo que me alegra le alegra,

lo que le duele me duele.

A mi modesto entender

lo que poema parece,

poesía es.

Agustin Satrústegui "Kapirutxo"


Dedicatoria:


A la hora de lidiar, los toreros lanzan su brindis dirigiéndose a una persona escogida, bien una amistad, un personaje, una bella mujer o al público en general. Esta dedicatoria, este brindis, lo dirijo a toda persona que ama a todo y todos, sin fronteras, ni límites, ni colores; a todos los que se sacrifican por los demás sin ánimo de lucro y a cuantos, movidos por un ideal, son capaces de sufrir las mil fatigas...

Juan Satrústegui (1919-2017) para su primer libro:

"De Estella a Santiago en bicicleta" (1975)



MORIR CON LA BOINA PUESTA

(Réquiem por Juan Satrústegui)

La boina, esa luna de azabache que corona las sienes de todos aquellos que sólo tienen la noche como herencia, ese nido de cálido fieltro donde cría su prole el ave aterida de la dignidad de los desvalidos, ese poema de versos circulares en permanente recital de sueños libertarios, ese lago de minúsculas orillas ovillado en los horizontes infinitos de la cabeza de los desheredados...

La boina, sí, también esa hostia negra que siempre comulgan quienes no pueden protegerse del hambre que produce la dieta de la intemperie, ese crismón laico de insólito diseño proletario, ese rosetón de pobre policromía y muy rico en acumular todos los colores del arco iris de la esperanza, ese capelo seglar experto en irradiar luz de aurora en el crepúsculo de los más humildes...

¡La boina!

Luna, nido, poema, lago, hostia, crismón, rosetón, capelo: todo ello lo acumuló Juan Satrústegui en su erguida prestancia de lírico ácrata hispánico, en su castiza pluma de escritor navarro, en su alma de "estellica de temple sin igual".

Por eso, y por su terquedad en ser hombre a toda costa, por su fiera pertenencia a las personas que nunca renuncian a llevar la chapela de las costumbres más universales del pueblo, la dignidad no caerá jamás de su cabeza. Juan Satrústegui muere con la boina puesta, que es como seguir viviendo en el corazón de quienes lo queremos y lo admiramos.

Y morir así es garantía de que ha recibido todas las bendiciones de su santidad la vida.

Ángel de Miguel

Estella, 17 de febrero de 2017


EL CARTERO DEL PRESIDENTE

(Un prólogo para Los ojos de las flores, poemario de Agustín Satrústegui)

El cartero del rey es un hermosísimo poema dramático del escritor indio Rabindranaz Tagore, Premio Nobel de Literatura del año 1913. El tema central es el deseo de Amal, un niño enfermo, que sueña con ser cartero del rey para poder salir de su habitación y conocer la belleza del mundo. Es amigo de Sada, una niña que vende flores , que le promete no olvidarlo nunca. La imaginación y las ansias de libertad del protagonista se hacen realidad cuando recibe la noticia de que el rey accederá a su petición de nombrarlo cartero real. Ni siquiera la muerte de Amal puede rasgar el velo de los deseos del niño, a quien su amiga Sada va a visitar llevándole como regalo una de sus flores.

Agustín Satrústegui, alias "Kapirutxo", que no es indio, pero sí cartero y poeta, también tiene sueños de libertad y aspira, como Amal, a conocer la belleza del mundo. Admiro desde niño a quienes, como él, ponen el mapamundi de la vida en las manos de nuestros ojos. Cada carta es, ¿era?, el lazo umbilical que nos une, ¿nos unía?, a los gozos y las sombras del pálpito del universo. Hoy, pese a los avances de las nuevas tecnologías, los carteros (ellos y ellas) siguen siendo heraldos de buenas noticias (en fin, también, de las no tan buenas: recibos de la luz, pago de impuestos, hipotecas, multas de tráfico...).

Los ojos de las flores, de Agustín Satrústegui,es el segundo poemario de un poeta cartero que lleva unas palabras mías. El anterior fue Muchacha del alba, un sensible manojo de versos con el que se abrió a la vida literaria el también poeta y cartero Miguel Ángel Irisarri. Recojo este dato para dejar constancia de mi admiración por un gremio que ejerce una actividad laboral esencialmente lírica, ya que podríamos decir que ambas palabras, cartero (también ellas) y poeta, son sinónimas.

"Kapirutxo", sobrino biológico y literario de su legendario tío Juan Satrústegui, nos ofrece en este libro un recorrido por las geografías mágicas del amor, el compromiso ecológico, la defensa de los débiles, la lucha por las causas nobles, la rebeldía ante las injusticias y, en fin, la celebración de la hermosura del paisaje amescoano, donde ejerce su magisterio de poeta itinerante y de cordial repartidor de buenas (y no tan buenas) noticias. Todos esos temas nos los presenta en un soporte de metros clásicos, interpretados de un modo peculiar y original, a su manera, con chisporroteos de jocosa acracia y luces de luciérnagas sobre poéticos prados progresistas. Para ello utiliza versos pentasílabos, hexasílabos, octosílabos, decasílabos y endecasílabos, entre otros. Maneja con precisión académica los endiablados engranajes de esas complicadas maquinarias literarias que son los romances, los sonetos, las cuartetas asonantadas, los cuartetos bien medidos y mejor armonizados. Todo ello con una campechanía y una espontaneidad de rimador consumado que lo emparentan con trovadores, juglares, bertsolaris, payadores y otros artistas de los versos populares y cultos.

Agustín fue alumno del Colegio Público "Remontival" de nuestra ciudad. Allí coincidí con él. Desde entonces, niño inquieto y soñador, hasta hoy, adulto soñador e inquieto, seguimos manteniendo una hermosa fraternidad. Nuestro común amor por la poesía es el cemento que une nuestra relación de amigos. Creo que se nota en estas palabras que quieren ser tanto un merecido espaldarazo de apoyo a sus versos como un cálido abrazo amistoso. El mismo apoyo que, con su flor, ofreció Sada, la niña florista de El cartero del rey, a su amigo Amal, aunque en este caso, y dadas las convicciones republicanas de "Kapirutxo", habría que hablar de El cartero del presidente.

Ángel de Miguel

Estella, 3 de febrero de 2017


Ilusión



ILUSIÓN

Nos hacemos a la vida, convivimos con la muerte, nos lamemos nuestra herida, esperamos mejor suerte. ¡Que aquella ilusión dormida un sueño nos la despierte!

La ilusión viene en huida. ¡Hay que aferrarla muy fuerte! Si por otros es sentida y logra comprometerte, una ilusión compartida puede dar vida a lo inerte.

Nos hacemos a la vida,

algunas veces alegre,

algunas veces sufrida, convivimos con la muerte,

natura prostituida

que trabaja y nunca duerme,

nos lamemos nuestra herida,

esa herida que nos duele

porque no está protegida, esperamos mejor suerte,

que lo que viene de ida

no tenga miedo y se quede.

Que aquella ilusión dormida,

trabajó muy duramente

y se acostó dolorida,

un sueño nos la despierte,

con ilusión renacida,

mirando bien lo que tiene.

Es una composición con rima consonante abab

seguida del mismo poema incrustando entre cada verso rimando en asonante

La ilusión viene en huida,

no sabe de dónde viene

porque salió en estampida. ¡Hay que aferrarla muy fuerte,

con las manos extendidas

y apretando fuertemente!

Si por otros es sentida,

cuando se expresa rebelde

con la razón aguerrida, y logra comprometerte,

sabiendo que es bien querida

tu aportación y tu mente,

una ilusión compartida,

en la que a todo el que viene

se le da la bienvenida... ¡Puede dar vida a lo inerte!

¡Puede sanar nuestra herida!

¡Puede vencer a la muerte!


Lecturas de ojos


OJOS DE CORAL

La primera luz del alba

deslizándose en el mar

pinta el iris con su calma.

Arrecifes de coral.

OJOS SINCEROS

Ojos azules bellos,

muy bellos.

Labios que ofrecen

besos sinceros.

OJOS DEL BÁLTICO

Veo unos ojos de azul intenso.

Son espejos que reflejan alma

en aguas del Báltico, serenas,

y dibujan la costa nevada.

Muestran un mar que tiene buen fondo

y la superficie iluminada

por el brillo de una jovencita

que se adivina viva y salada.

OJOS VALIOSOS

Me sonríen unos ojos.

De vulgar no tienen nada,

y me muestran su valía

con el azul de las hadas.

Me gusta ver esos ojos

y me alegra su mirada.

OJOS CON SAL

Al ver esos ojos

azules con sal,

la luna me dijo

por donde mirar.

Mirando esos ojos

azules de mar

se ve cristalina

la profundidad.

Siguiendo a la luna

pude comprobar

que el sol se recuesta

en el fondo del mar.

Descubrí al lucero

en su despertar

mirando esos ojos

con sol y con sal.

OJOS ALEGRES

Encuentro unos ojos

que miran al cielo

cuando el aire mueve

las olas del mar.

Brillan esos ojos

sinceros de cielo,

bailan esos ojos

alegres de mar.

OJOS DE CIELO

El reflejo de un cielo

despejado y claro,

eminentemente claro,

en aguas que de nacimiento

son hermosas, sublimes...

Tus ojos.

Cuando sonríes, tus ojos

chispean destellos

de un gran sol:

Tu corazón.

OJOS DE ESMERALDA

Reflejaban esos ojos

de sutil verde esmeralda

su corazón dolorido,

su tremendo orgullo herido,

pero su ambición intacta.

Reflejaban esos ojos

de sutil verde esmeralda

su feminidad vibrante

con expresión irritante

y su confianza cauta.

Reflejaban esos ojos

de sutil verde esmeralda

una duda en su conciencia,

unas dosis de impaciencia

y una pena que no mata.

Reflejaban esos ojos

de sutil verde esmeralda

destellos esperanzados,

entre los decepcionados,

porque valor no le falta.

Los cien mil efluvios rojos

que turbaban nuestra calma

me impidieron ver el alma

reflejada en esos ojos

de sutil verde esmeralda.

OJOS DEL EGA

Sus ojazos verdes claros

cuando sonríe chispean

como las aguas del Ega

reflejándose en Los Llanos.

OJOS DE PRIMAVERA

Ojos de una primavera

que sabe lucir su verde

moviendo las hojas tiernas

al compás que da su mente.

OJOS DICHOSOS DE VER

Buscando unos ojos

dichosos de ver,

el alba te espera

para amanecer.

OJOS HIERBABUENA

Amaneces en tinieblas,

el sol te va a rescatar,

disipa toda la niebla

para ver con claridad

esos ojos hierbabuena

y ese cuerpo de cristal.

OJOS DE JADE

Ojos de sencillo jade

esculpido y bien pulido

con razón, alma y esmero

por mil duendes divertidos

y bastante pintureros.

Ojos que reflejan arte.

Ojos que tienen sentido.

OJOS DE CANELA

El sol languidece

y la luna vuela.

Una estrella ofrece

ojos de canela,

canela tostada

al sol que ella anhela.

El sol no aparece,

la noche es eterna,

lucen unos ojos

de canela tierna.

Luna, anhelo y viento

agitan la vela,

con el movimiento

vuela, vuela y vuela.

Luna, anhelo y viento,

ojos de canela.

OJOS DE COLIBRÍ

No para quieto

el colibrí,

busca los besos

aquí y allí.

Los capullitos

le ven venir

y dicen: ¡Venga,

bésame a mí!

Sus ojos miran

aquí y allí,

sus alas saben

qué decidir.

Ágil responde

el colibrí,

lo necesita

para vivir.

Vuela con gracia

el colibrí

besando flores

aquí y allí.

OJOS DE URBASA

Las hojas caídas

viviendo en su casa

pintan de colores

los ojos de Urbasa.

Ojos que te miran

y el tiempo no pasa.

OJOS DE TOPACIO

Ojos que al mirarte

te abren en canal.

No puedes librarte,

topacio imperial.

OJOS INMENSOS

Ojos inmensos

como su alma.

Marrón intenso

que te desarma.

OJOS DE MIEL

Sus dulces luceros,

sus ojos de miel

al sol le dan celos,

compiten con él.

OJOS DE CAOBA

Sus ojos marrones

que te miran claro

son madera noble

pintada en encanto.

Ojos de caoba,

fuertes y serenos.

Ojos de caoba,

alegres y tiernos.

OJOS DE GITANA

Se baja del coche

junto a sus hermanas.

Brillo en los cabellos,

labios de manzana.

Haciendo un derroche

abren su ventana,

amplios ojos bellos,

de belleza sana,

negros como noche

de luna temprana,

con rojos destellos

de sangre gitana,

que le pondrán broche

de oro a mi mañana,

si bailo con ellos

la copla serrana.

.

OJOS SUGERENTES

Le digo algo de frente,

si se ríe es una flor,

y sus ojos sugerentes

se parecen mucho al sol.

OJITOS

Esos ojitos

de mar limpia y clara.

Esos ojitos

que brillan y bailan.

Esos ojitos

sinceros del alma

OJOS INGENUOS

Paloma de corazón fuerte

pero con ojos ingenuos.

Seguiste a un ángel que dijo:

-No pasarás frío en invierno,

y muy pronto descubriste

que era un ángel del infierno.

OJOS SIN COLOR

Encontré unos ojos tiernos,

aún no sé de que color,

puede ser marrón o verde

o una mezcla de los dos,

con lágrimas que brotaban

directas del corazón

y pintaban sus pupilas

con esmalte de dolor.

Puede ser marrón tristeza

o verde desolación,

castaño desesperanza,

¿o es un pardo depresión?

Me miró y me dejó helado

porque en todos acertó.

Flores al corazón


PIROPO ECOLOGISTA

Tú has de ser ecologista:

¡No puedes decir que no!

Serás por ideología

o agradecimiento al sol.

Cuida la naturaleza.

¡Cuida de ella, por favor!

Ella crea la belleza

y al crearte se esmeró.

Tu razón, inteligencia,

y tu inmenso corazón

son el fruto de su ciencia

y también de su ilusión.

Cuida la naturaleza.

¡Trátala con mucho amor!

Ella crea la belleza,

y de ti se enamoró.

Para demostrar que te ama

al nacer te regaló

bellos ojos, claros de alma,

que reflejan fe en tu honor.

Cuida la naturaleza.

¡Agradécele el favor!

Ella crea la belleza,

y contigo... Se lució.

GRACIELA

Apagar el sol,

borrar las estrellas,

son tan imposibles

como que Graciela

no luzca de perlas

lo que lleva en ella.

Se viste de trapo,

mas solo con verlo,

sus dos grandes ojos

lo hacen terciopelo.

Cualquier complemento

que lleve Graciela

se ve reluciente

en su piel de canela.

Apagar el sol,

borrar las estrellas,

son tan imposibles

como que Graciela

no luzca de perlas

lo que lleva en ella.

Unos toscos guantes

se pone Graciela,

el don de sus manos

los convierte en seda,

y las viejas botas

las puede tornar

en finas sandalias

con su caminar.

Apagar el sol,

borrar las estrellas,

son tan imposibles

como que Graciela

no luzca de perlas

lo que lleva en ella.

Viste medias negras,

que así de repente

sus hermosas piernas

vuelven transparentes,

y un viejo sombrero,

roto en pedacitos,

junto a su cabello

queda muy bonito.

Apagar el sol,

borrar las estrellas,

son tan imposibles

como que Graciela

no luzca de perlas

lo que lleva en ella.

Las grandes enaguas

en tanga han quedado

sintiendo bombones

de algodón prensado.

Si usa el corpiño

"Figura Bonita"

se le ve estupenda

cuando se lo quita.

Apagar el sol,

borrar las estrellas,

son tan imposibles

como que Graciela

no luzca de perlas

lo que lleva en ella.

SI ME DEJAS ELEGIR

Antes que ser para ti

una punta del flequillo,

si me dejas elegir

quiero ser peine o cepillo

para poder discurrir

por tu cabello y su brillo.

Antes que ser para ti

cordero de tu rebaño,

si me dejas elegir

quiero ser el gel de baño.

Fina piel poder sentir

orientado por tu mano.

Antes que ser para ti

un cordón de tu zapato,

si me dejas elegir

seré tu cacao de labios,

y al relamerte tú en mí,

yo dichoso los hidrato.

Antes que ser para ti

un resquicio del invierno,

si me dejas elegir

quiero ser tu oído interno

para así poder oír

tu voz con tono más tierno.

Antes que ser para ti

como aquel abrigo viejo,

si me dejas elegir

yo quisiera ser tu espejo

para verte sonreír

cuando admiras tu reflejo.

LA TORTURA

Te pedí que no repitas

la tortura,

de bailar esas dos piernas,

sabrosura,

mientras miras a otro hombre

con amor.

Pero ahora que lo pienso

con cordura,

quiero ver esas dos piernas,

sabrosura,

que me ayudan a aguantar

cualquier dolor.

-

¡Tortúrame ¡

¡Sí, sí!

¡Tortúrame ¡

Que tus piernas, sabrosura,

son lo más lindo de ver.

¡Tortúrame ¡

¡Sí, sí!

¡Tortúrame ¡

Al trasluz de tu figura

yo veo el amanecer.

-¡Torturaré¡

¡Sí, sí!

¡Torturaré ¡

El tiempo no todo cura

y lo tienes que saber.

¡Torturaré¡

¡Sí, sí!

¡Torturaré ¡

Mis dos piernas, sabrosura,

te serán caras de ver.

Mira bien que ahora te digo

con finura:

Quiero ver esas dos piernas,

sabrosura,

al compás de tu cintura

y con su son.

Y si un día tú cometes

la locura

de mandarme una mirada

con dulzura,

estos ojos volverán

a ver el sol.

-

¡Tortúrame ¡

¡Sí, sí!

¡Tortúrame ¡

Que tus piernas, sabrosura,

son lo más lindo de ver.

¡Tortúrame ¡

¡Sí, sí!

¡Tortúrame ¡

Al trasluz de tu figura

yo veo el amanecer.

-¡Torturaré¡

¡Sí, sí!

¡Torturaré ¡

El tiempo no todo cura

y lo tienes que saber.

¡Torturaré¡

¡Sí, sí!

¡Torturaré ¡

Mis dos piernas, sabrosura,

te serán caras de ver.

.

TUS PIERNAS

Me sugieres que yo escriba

de tus piernas poesías.

Esos dos bellos caminos

recorrerlos cuesta días

y suavemente me llevan

al origen de la vida.

Me sugieres que yo escriba

caminando, poesías.

Me sugieres que yo escriba

de tus piernas poesías.

Esos dos hermosos versos

del poema de tu vida,

un libro que andando escribes

y lees con valentía.

Me sugieres que yo escriba

con tus versos poesías.


TUS ANDARES

Cientos de lagos

pueden ser mares

con sal que derrochas

en tus andares.

Cuando caminas

con sabrosura

luce el contorno

de tu figura.

Hoy las estrellas

saben bailar

el ritmo que enseña

tu caminar.

Cuando caminas

con sabrosura

luce el contorno

de tu figura.

Miles de flores

van a tomar

aire que llevas,

y perfumar.

Cuando caminas

con sabrosura

luce el contorno

de tu figura.

INTERROGATORIO

Te estamos investigando,

sabemos mucho de ti.

¡Cántanos tus fechorías

o te vas a arrepentir!

El viento mueve con fuerza

la superficie del mar,

las olas están furiosas,

es día de tempestad.

Cuando tu esbelta figura

se acerca para nadar

deja de soplar el viento

y el mar encuentra la paz.

¡No me digas que no hiciste

con el aire más que un pacto!

¡No me niegues que tú tienes

con la mar algún contrato!

El manantial está seco,

hace un mes que no da nada.

Se quedó sin vida el río,

el oxígeno le falta.

Apareces por la orilla,

tienes sed y estas cansada,

te relames los dos labios

y empieza a fluir el agua.

El río se recupera,

nacen peces de la nada.

¡Lo tienes que confesar,

te delata la mirada!

¡Tienes trato con los duendes

y un convenio con las hadas!

Hay un cielo despejado

mientras duermes en tu cama.

Empiezan a llegar nubes

cuando vas a la ventana,

y al mirarlas con tus ojos

las modelas con el alma.

Creas un sinfín de formas,

de barco, de corazón...

Y la mayoría dejas

para la imaginación.

Te cuesta muy poco tiempo,

haces todas a la vez,

así el sol puede pintarlas

de color amanecer.

¡Es evidente que el alba

a su red te incorporó

conociendo que las musas

hacen noche en tu balcón!

Es noche de luna nueva

y reina la oscuridad,

al ser un día de invierno

el sol tarda en asomar.

Como tú estás desvelada

te apetece pasear.

La luna cambia su ciclo

y el sol debe madrugar.

¡Aunque te hagas la inocente

yo lo puedo demostrar!

¡Tengo pruebas que te implican

en la trama solunar!

El prado se ve amarillo

por la sequía estival,

las flores están muy tristes

y sus olores se van.

Apareces por el campo,

has salido a caminar,

la hierba toma su verde,

recupera la humedad

y las flores jubilosas

empiezan a perfumar

los besos que dan tus pasos,

las caricias de tu andar.

¡Reconoce que te has hecho

secuaz del agua y el sol!

¡Confiesa que también eres

cómplice de la ilusión!

Yo sé que me estás mintiendo

al negar con la cabeza

que el comentario oportuno,

con sentido y sutileza,

la serenidad del porte

y tu exquisita belleza

salieron de algún conjuro

entre la naturaleza.

El ritmo de tu canción

y tu voz de terciopelo

te involucran en el cartel

de canarios y jilgueros.

Sabemos que perteneces

a una banda de ladrones

que trafica con sonrisas

y roba los corazones.

En el asalto del cielo,

con total alevosía,

te llevaste de botín

millones de poesías.

Cuando actúas por la noche,

no te ven ni dejas huellas

porque tienes de compinches

a la luna y las estrellas.

En la estructura del clan

puedes ser tú la primera:

Organizas el otoño,

diriges la primavera

y también mueves los hilos

que manejan las mareas.

¡Confiésalo ahora que puedes

o te van a sentenciar

a consumirte en la hoguera

con un fuego pasional!

Si te niegas a cantar

te encerrarán de por vida

en el penal del amor

con la perpetua y un día.

EL SUBIDÓN

No sé por qué

todo mi cuerpo está pintado de color,

se ha liberado y desmadrado

el corazón:

Creo que tengo un subidón

de rock and roll.

No sé por qué

las piernas bailan

sin que se lo pida yo,

mis manos giran de la luna para el sol:

¿Se manifiesta un subidón

de rock and roll?

Ya sé por qué

mis cien neuronas se han puesto

de dos en dos

juntando manos y moviendo resplandor:

¡Me has provocado un subidón

de rock and roll¡

Ya sé por qué.

Ya sé lo que es

un subidón

de rock and roll.

CONEXIÓN

Cuando me tomó la mano,

la emoción voló con alas

de las hojas que llovían

alegres desde las hayas

celebrando que su baile

estaba uniendo dos almas.

Cuando dos almas se unen

fruto de una lluvia mágica

no las podrá separar

ni el tiempo ni la distancia.

La conexión siempre ayuda

a salvar las circunstancias.

MANO SOBRE MANO

Mano sobre mano,
amor sobre amor.
Dedos que se abrazan
arropando al corazón.
Mano sobre mano,
amor, que al amor
dibuja unas notas
y las pinta de color.

El vacío acecha,

se quiere acercar,

mano sobre mano

lo puede ahuyentar.

Cuando el miedo ataca

fuerte a la moral,

mano sobre mano,

la protegerá.

.

Cae un aguacero,

fuertemente llueve.

Mano sobre mano,

lo convierte en nieve

que a ritmo de saxo

pinta suavemente

amor en las manos

y en su abrazo crece.

Mano sobre mano,
amor sobre amor.
Dedos que se abrazan
arropando al corazón.
Mano sobre mano,
amor, que al amor
dibuja unas notas
y las pinta de color.

SENTIR QUE SIENTES

Cerrar tus ojos,

gozar tus labios,

sentir que sientes

mi cuerpo al lado.

Abrir tus ojos,

besar tus manos,

sentir que sientes

las mías dando

abrazos fuertes

y enamorados.

CARNE Y HUESO

Es delicia comprobar

que lo que veía en sueños

no es una estrella fugaz

ni la luna en el espejo,

sino bella realidad,

realidad de carne y hueso.

Es de piel, labios y sal,

es de abrazos y de besos.

FUI VALIENTE

Yo volaba,

dibujaba

ese amor que te ofrecí,

y sentía

que podía

darte lo mejor de mí.

Yo pensaba

que te daba

algo bueno para ti,

y creía

que tenía

un lugar en tu sentir.

Fui valiente,

muy valiente,

un trocito conseguí,

y fue mucho,

mucho, mucho,

te lo tengo que decir.

DISCULPAS

Disparé un dardo certero

en el centro de tu ego,

no fue a posta y solo quiero

que me sepas perdonar.

Si no puedes perdonarme

lo comprendo, pero dame

la noticia que me calme:

No me vas a despreciar.

.

Las estrellas dibujamos

con su brillo entre las manos

y por un error humano

no las podemos tocar.

Inventamos carcajadas

con el sol en las miradas

y por diez palabras malas

no nos podemos mirar.

Al calor de los amores

se arrimaban las canciones

y al oír ruidos feroces

no se quieren acercar.

Disparé un dardo certero

en el centro de tu ego,

no fue a posta y solo quiero

que me sepas perdonar.

Si no puedes perdonarme

lo comprendo, pero dame

la noticia que me calme:

No me vas a despreciar.

El IMÁN

Se aproxima sonriente

y renace la ilusión,

te aferras a un clavo ardiente

que te quema el corazón.

Cómo ando y hacia dónde

le pregunto al bandoneón:

Sollozando, me responde:

-¡La misma ruta que yo!

Alejarme de ella quiero

como si fuera Satán,

blindo el corazón con hierro

y ella se torna en imán.

Cómo ando y hacia dónde

le pregunto al bandoneón:

Sollozando me responde:

-¡La misma ruta que yo!

No sé qué ruta seguir,

no la encuentro, estoy perdido

y tampoco puedo huir

por la senda del olvido.

Cómo ando y hacia dónde

le pregunto al bandoneón:

Sollozando me responde:

-¡La misma ruta que yo!

RESIGNACIÓN

Marco a fuego mi destino

en corteza de ciprés,

sangra resina y con vino,

si la bebo, caeré.

Ya bebí vino y resina,

ya tomé de la poción,

que al final me contamina

de miedo y resignación.

Por hondos surcos camina

la sangre de mi canción.

Cauces de vino y resina,

alforzas de bandoneón.

Esta vida traicionera,

prisionera del querer,

me dice con tez grosera

que ya nada puedo hacer.

Una forma muy ramera

de empezar a perecer,

aprender de mil maneras

lo que no quiero saber.

Por hondos surcos camina

la sangre de mi canción.

Cauces de vino y resina,

alforzas de bandoneón.


TANGATO

-Encontré un gato tanguero,

taciturno y pensador,

llorando en el basurero

un tango desgarrador.

-Se largó la gata parda

y me dejó destrozao,

a otro gato dio su alma,

y no me dijo ni miao.

¡Son los golpes de la vida!

¡Son los golpes del amor!

Vago por los callejones,

rondo en busca de su olor,

olfateando los rincones

con nostalgia y con dolor.

¡Arrabales de la vida!

¡Arrabales del amor!

De milonga ya la vi,

junto al que me la robó,

un gato con pedigrí

y algo mas fuerte que yo.

¡Arañazos de la vida!

¡Arañazos del amor!

Con la derrota asumida,

esa gata me dejó

grandes llagas en mi vida.

¡Arañazos del amor!

-En las noches milongueras,

cuando quema el corazón,

con él me siento en la acera

y acompaño al bandoneón.

FELINA

Felina huidiza, irreductible.

No ofertarás tu rendición al que piensas que te ataca, ni volverás a sumergirte en el agua que te escaldó, saltarás hacia el incalculable abismo o hacia la luz del fuego abrasador.

Naturalmente elegante.

Presumida, porque sí.

Tu mirada indaga,

tus movimientos son baile, tus paradas una pose,

Tu indiferencia hace soñar.

Prefieres robar, furtiva, a comer de la mano de quien

se cree tu amo.

Las caricias procuras y pagas con tu ronroneo engatusador, mil veces celosa de quien

te las puede usurpar, mil veces ingrata con el incauto

que te las da.

No hay nada en el universo que pueda suplir lo único que veneras:

Tu libertad.


Almadolorida

Foto importada de la prensa.

MIGRANTES

Huyen de la guerra,
guerra interesada.

Llevan de equipaje

miedo en su mirada

y temen del cielo

su lanza afilada,

bombas asesinas,
laicas o sagradas.

Dejan una vida

de sangre impregnada.

Tienen un destino,

se llama "Escapada".

Miran al futuro

y no encuentran nada.

Vagan por la tierra,
tierra desolada,

entre los cañones
y las alambradas.

LLANTO SIN AIRE

Llanto sin aire,

llanto infeliz,

lloras y nadie

llora por ti.

Llanto que el ruido

nadie silencia,

llanto abatido

por la violencia.

Llanto sin aire,

llanto infeliz,

lloras y nadie

mira por ti,

cuando en un nido

de indiferencia

yaces herido

con tus dolencias.

CHARCOCORRIDO

Estaban cruzando el charco,

a punto de terminar,

con dos gringos en el barco

que eran poco de fiar.

Llegaron tres patrulleras,

no les dejaron pasar,

sacaron sus metralletas

y eran muchas, muchas más.

Los gringos eran chivatos

de la banda "Donaltram",

sabían que en cualquier rato

los iban a delatar.

Transportaban cosa buena,

era su último trabajo,

y también en la bodega

llevaban a sus chamacos.

Fueron a comisaría

y allí se gestó el final:

Los chamacos sin sonrisa

y sus padres al penal.

Esta historia, mis compadres,

es una historia normal

de gente de buena madre

que el hambre le trata mal.

esperanza

ESPERANZA

¿Cuántas veces la Tierra ha de girar?

¿Cuántas los días sin ver el lucero?

¿Y cuánto su rocío mañanero?

¿Cuándo su resplandor podré alcanzar?

Cuando la muerte deje de triunfar

y a toque de silencio en el mortero

desterremos al "homo carroñero"

desnudo y sin carroña que almorzar.

Cuando sea ceniza el desconsuelo.

Cuando el sol amanezca en el poniente

y la luna le siga por detrás.

Cuando caiga divina agua del cielo

que destruya el veneno de serpiente.

Entonces, solo entonces y quizás.

¿Cuándo su resplandor podré alcanzar?

Cuando crujan y tiemblen los cimientos

de mansiones y templos opulentos

reclamando personas sin hogar.

Igual a ver su luz puedo llegar.

Cuando los mares rompan en lamentos,

se conjuren las olas con los vientos,

llevando al miserable a naufragar.

Cuando un rayo de sol deshaga el hielo

que oprime lo gentil y lo valiente,

el vivir y el luchar con los demás.

Cuando caiga divina agua del cielo

que destruya el veneno de serpiente.

Entonces, solo entonces y quizás.

Sé dónde no la podré encontrar.

En la paz de las aglomeraciones,

el tumulto de inhóspitos rincones

o en los incendios del fondo del mar.

En manchas negras de la claridad,

en la gran ternura del corazón

de los Consejos de Administración

o en la gran mentira de su bondad.

En los escrúpulos de un usurero,

en el crepúsculo del sol naciente

o en el avance de la marcha atrás.

Donde caiga divino el aguacero

que destruya el veneno de serpiente.

Allá, en esos espacios y quizás.

¿Dónde la busco?, ¿dónde hay que mirar?

En los que tienen un mañana oscuro,

en la juventud que exige futuro

y en los que siempre fueron a luchar.

Los que retan a la tempestad,

los que nunca se dieron por vencidos,

corazones en un puño fundidos,

reclamando techo y dignidad.

Donde está el sentimiento verdadero

que es capaz de nadar contracorriente

en su avance que no mira hacia atrás.

Donde caiga por fin el aguacero

que destruya el veneno de serpiente.

Mirando hacia ese norte, pues quizás.

Porque la esperanza nunca se pierde,

muchas veces se tiene que ocultar

en largos laberintos que ella entiende

y no nos queda más que investigar.

Agua



FRAC KING (fracturación hidráulica)

Introducen agua

venida del cielo,

agua que envenenan

sin ningún recelo.

Rompen las entrañas

de nuestro subsuelo.

La tierra se enfada,

suelta su rebelo,

ellos lo recogen,

lo queman, y al vuelo.

Y llora la tierra

y se enfada el cielo.

A COSTA DE TUS ENTRAÑAS

Cruzando el Valle de Allín,

allá por Tierra de Estella,

en Sierra Lóquiz se adentra

desde Ganuza una senda.

Un arroyuelo deleita

nuestro oído con sus aguas

destellantes, bajo el sol

que penetra en la vereda.

Entre robles miro el cielo

desplazando nubes blancas

sobre gigantescas rocas

verticalmente abrazadas.

Generosa madre tierra,

tu grandeza me enamora

y pienso en cosas que el hombre,

a costa de tus entrañas,

cruelmente ambiciona,

destrozando tu belleza

y envenenando tus aguas.

Entre boj, brezo y romero,

por una empinada cuesta,

continuamos la senda

que nos conduce a la ermita:

En la campa de Santiago,

mi cabeza se pregunta:

¡por los siglos de los siglos!

¿para qué tantas iglesias?

si los hombres aún seguimos

siendo malos y egoístas.

¿No será mejor tener

por "dios" la naturaleza,

que paciente y majestuosa

nos enseña a amar la vida?

Después de echar un bocado

a la vera de Santiago,

sin rogativas ni rezos,

entre robles llaneando,

continuamos el camino.

Al llegar a los cortados,

otra vez yo me enamoro

de un mar verde de parcelas

entre caminos y pueblos,

Libre aquí arriba me siento,

como águila surcando el cielo,

un cielo que no es de nadie

y quieren ponerle dueño.

¿Qué nos pasa a los humanos?

¿Por qué nunca aprendemos

ni de los errores de otros,

ni de los errores nuestros?

Seguimos haciendo guerras

para obtener beneficios,

somos sangrientos verdugos

de la tierra que nos nutre

y hasta de nosotros mismos.

Al bajar de los cortados…

Volví otra vez al mundo.

Michel Garrido


RÍO SECO

Mi abuela decía que el río seco

guardaba el agua bajo las sayas…

En invierno y en primavera, con las lluvias y el deshielo,

el río parece río y no un despojo,

y así, el agua corre, bulle y serpentea

soltando barriles de espuma sobre las orillas.

¿De dónde sale tanta agua? , me preguntaba…

En verano, sin embargo, caminaba entre las piedras del río,

sobre las que apenas corría un hilo de agua.

Piedras verdes, con musgo, redondas,

con la huella del paso del agua que las pulió y las moldeó

como si fuera la mano de un artesano, de un ceramista, de un alfarero…

¿Qué fue del agua que había?, me preguntaba…

Y mi abuela, en su papel de sabia decía:

la tierra guarda sus secretos bajo la piel,

el río que perdiste se esconde bajo las faldas de la montaña…

Iosu Moracho Cortés


RÍO PONGA

Quien duerme en Abiegos

calma su tormento

porque el rÍo Ponga

le canta su aliento,

al son de una orquesta

con sus instrumentos,

picos que interpretan

"Aire en movimiento".


"PUZU"

El Ezkurra salta con su poesía,

el pozo recibe toda su frescura,

las flores mas altas rinden pleitesía.

El alma se inhibe, ya nada le apura.

AHORA NO TE DETENGAS

El otoño (orfebre del color

y sus matices), sigilosamente,

ha hecho acto de presencia

en los hieráticos chopos

que vigilan el curso del río.

Con la rutina de siempre,

el impetuoso viento arranca,

sin ninguna consideración,

multitud de hojas que viven

en las gráciles ramas de los árboles.

Y tú, que has luchado contra el desánimo

que produce ver cómo la Utopía

se diluye entre promesas y engaños,

tú ¡no te acobardes!¡no te rindas!

Cuando te mires al espejo y te veas

tan diferente, que apenas te reconozcas,

cuando tu piel tenga surcos de nostalgia,

tus cabellos sean como espumas

de un mar enfurecido, y tu rostro

una veraz imagen del inexorable

paso del tiempo. ¡No te angusties!

Piensa que aún te quedan

muchos sueños que cumplir,

cientos de caricias y besos que dar

y hermosos caminos por recorrer.

Ahora que el transcurrir de los años

quiere doblegar tus ansias de lucha,

como hace el fuerte viento

con las débiles amapolas

hasta tumbarlas sobre la hierba.

Ahora que el cuerpo invisible

del doloroso desaliento

quiere hacerse dueño de tu vida,

ahora, tenaz caminante, ¡no te pares!

Haz como los finos juncos que rodean

la solitaria charca del valle,

que una vez pasada la tormenta

se yerguen como esbeltas espadañas.

Sé fuerte como los farallones de Sierra Lóquiz,

Sé libre como el viento de Garagüeta,

sé humilde y sencillo como el Río Cidacos,

que oculta su líquido tesoro

bajo arenas y cantos rodados,

a la espera de las abundantes lluvias

que cubrirán, como siempre,

gran parte de su sediento cuerpo.

Y mientras llega el definitivo

invierno crepuscular,

tú, que ves tan cerca

el último tramo del trayecto,

haz como el pequeño río,

que mira hacia el mar

y no al punto de partida.

Recuerda siempre, fugaz soplo de vida,

los consejos de los grandes poetas:

"No te resignes, no te rindas,

ahora no te detengas!

Miguel Correas

A J.E. Malinowski, Walt Whitman y Omar Jayyam.

A Carmen Arnedo Sigüenza, por su entereza vital.




ODA AL UREDERRA

Urbasa se despierta sonriente

porque la primavera ya se extiende.

Ese verde manzana reluciente,

esa gran explosión que todo enciende,

se apodera del bosque intensamente.

Le da vida, le da alma, le da duende.

.

El duende de primavera,

el intenso azul del cielo,

y el misterio de la niebla

se citan en el subsuelo,

las entrañas de la sierra,

tejen fino y con su velo

dan color al Urederra

(agua bonita, en Euskera)

En su mismo nacedero

han vestido al Urederra

con una capa, un velo

y la esencia de la sierra.

Al reflejarse tan bello

salta valiente a la tierra

.

El niño viene saltando

y divisa Amescoa Baja.

Luego sigue caminando

porque el valle lo relaja.

Las entrañas de la sierra



Camina hacia el valle,

y cuando se asoma,

susurra al detalle

(usando su idioma)

lo que ve e intuye.

¡Ese pasacalles

del agua que fluye!

En su perspectiva

escribe su nombre

con letra cursiva

que no entiende el hombre.

El Itxako se aproxima

con la fuerza del saber

y una mente cristalina

que le ayudará a crecer.

De Améscoa se esta alejando;

es su madre y no le apura.

Lo hace triste, sollozando

por dejar tanta hermosura

y cuando estalla en el llanto

riega los chopos de Intzura.

Ahora no está para cantos:

Se aproxima la angostura.

Tuvo penas, horas muertas

y también sus estrecheces.

Valdeallín le abre sus puertas

porque el joven lo merece.

Por Valdeallín se pasea

satisfecho de su suerte.

La orilla le piropea:

-¡Eres mozo, guapo y fuerte!

Lokitz se ha fijado en él,

Larraintza también le observa

y se enamoran al ver

como acaricia la hierba.

Ya las peñas de San Fausto

a Belástegui se arriman

y lo quieren encerrar

pero el mozo no se achica.

Rodando va a dibujar

la madurez de su vida

y en Bellín puede encontrar

mayor amplitud de miras.

-Yo aportaré mi frescura,

mi color, mi juventud.

-Yo, mi nombre, mi finura,

mi experiencia y mi virtud.

No dejan de conversar

el Ega y el Urederra

porque acaban de forjar

una amistad verdadera.

¡Lo tienen que celebrar!

¡Juntos bajarán a Estella!

Cuando a Estella llega el Ega,

mucho tiempo necesita.

La escribe, canta, recita,

la dibuja y colorea

Al Urederra expresé

cariño y admiración.

Con un susurro noté

que entraba en conversación.

Algo así yo le escuché

porque en su idioma me habló:

-Que me adoren no es mi fe,

ni ser causa de pasión;

respeto quiero tener

y si me miman, mejor.

Lo mismo que hacéis conmigo

haced con todos los ríos.



UREDERRAREN OLERKIA

Urbasa irribarretsu esnatzen da

lehenengo hostoak disdiratzen;

berde-sagar miresgarriak

basoko garo egunsentian

kolor-eztanda zipriztitzen…

Indarra sortzen da.

Arima hegan egin…

Lilura egiten da.

Berezko sorburuan

Urederra janzten da.

Ur-buztinez, landarez

eta lurrezko mamia.

Eder islatzen doa

ertzeetatik jauzten.

Urederra lasterka

eta jausika doa

lizar, pagondo artean.

Dibertitzen da, umea,

irribarretsu, alai,

bai kantari, berritsu.

Sekula santa isilik.

Urederra iristen da

jauzi-jauzika

eta kanta-kantari

Ameskoatik Behera

azkar jarraitzen du

larreetatik aurrera.

Haranaruntz doa.

Halako batean

bere ahotsa entzuten da

jausika, harri artean;

kaleko hots-jarioak

dakar oiartzuna.

Izena idazten du

ibilaldi horretan.

Ur hitzak baitira

gizakiaren eza.

Itxako hurbiltzen dator

jakinduriaz hazita.

Alai, indartsu, mamitsu,

gardentasunez eginda.

Gure Ameskoatik aldendu

amagandik urrutira,

tristetu, negar zotinka

hotsarekin maitemindu.

Intzurako lur garoak

ureetan lehertzen dira.

Beti aurrera isil-isilik

bere estutasunaren bila.

Penatsu igaro zen

bai larri benetan.

Hor Valdeallin dago

atea ireki duena.

Allintik isurtzen da,

sorte handia urarena.

Gendearen kuskusero:

ibai polita dela!

Lokizek ikusten du.

Larraintzak gauza bera.

Biak bai maiteminduta

amore emanda lurrean.

-

Ega eta Urederra

mintzatu dabiltza

maitakor, laguntsu,

Lizarra aldera

elkarrekin martxan

ur-jario esamesak.

Errezatzen dute:

Bat bere eskarmentu.

Bestea hots gaztea.

Urederra maitea ibaiari

pozaren pozez idatzi nion

eta zinez xuxurlatu zidan

ur hizkuntzaz eder solasaldi.

Goxo-goxo bere hitz alai

iturrian bezala erran zuen:

gizaki eta izaki aspalditik

elkarrengana bildu ginen.

Miguel Ángel Irisarri

NANA DE LOS COLORES

Los colores ya presienten

que van a desaparecer

y por eso lucen fuertes

en un bello atardecer.

El verde y rojo oscurecen

si el amarillo se va.

Solo el blanco de la luna

al azul alumbrará.

Pinta en tus ojos la tarde

que la noche va a llegar.

Duerme, mi amor, en colores

y en colores soñarás.

NANA DE LA CANDELA

Duerme, Candela, tu centinela despierto está, y con cautela tu centinela te acunará. Duerme, Candela, que ya la vela se va a apagar. Duerme, Candela, duérmete y vuela en tu soñar.

NANA DEL EGA

Baja el Ega por Estella,

y a la luna encontrará.

Se marchará susurrando

la canción que ella le da. Tus ojos se están cerrando,

tu alma en un vuelo está.

.

Duerme, mi cielo, percibe

el susurro que se va,

y descansarás soñando con palomas de la paz.

Si dormitas a mi lado,

tu sueño mío será.

Si te despiertas y dudas que ese sueño no es verdad, aquí me mantengo en vela

porque se haga realidad,

y mañana iré al trabajo

para procurar tu pan.

Duerme mi amor y navega

con palomas de la paz.

Ellas te llevarán en vuelo

a la justicia social.

Duerme, cariño, percibe

el susurro que se va.

Cierra los ojos, y cuando

su canción puedas captar,

tu corazón que palpita

al mío se acercará

para ir sintonizando

con muchos y muchos más.

Duerme, mi vida, percibe

el susurro que se va:

Que tu corazón palpite

por la justicia social,

porque solo en ella anidan

las palomas de la paz.

EPÍLOGO

A mí, que soy más de principios que de finales, me toca epilogar "Los ojos de las flores", este librogénito de Agustín del que todos sabemos que no va a ser hijo único. El prólogo me lo ha ganado por la mano, por la pluma, por la admiración y por Magisterio Don Ángel, al que todos llamamos así y luego tuteamos, como también apeamos el tratamiento al cartero que nos ha ocupado unas páginas atrás.

Kapi le habla de tú a la poesía y lo hace mirándole a los ojos, con esos ojos nuevos y azules detrás de una gafas que le hacen ver más allá de lo habitual. Con los ojos nuevos de quien mira cada día lo cotidiano, como si todo fuera una primera vez.

Ese es el valor de su poesía.

Son versos para leer en voz alta, como nos enseñaba a hacer el maestro en aquella infancia en blanco y negro, a quien los libros ponían el acento, el color y la compañía.

Esencia le llamaban los clásicos. Una poesía desnuda de retóricas vacías, pero llena de imágenes y de acciones que nos son conocidas y que como tal reconocemos porque son de todos, como los son los paisajes, el paisanaje y su figura.

Le llamamos Kapi o Satrus, porque Agustín parece que es un nombre para alguien más pequeño, con una presencia menor y Kapirutxo es largo, o más bien alargado. Él llega un poco después de anticipar su sonrisa en el vuelo de una boina bien heredada y siempre tiene una sorpresa en cada conversación. A sus rimas les sucede igual; sabes que vienen, las esperas tal y como son; simpáticas, sinceras, de verdad y a la vuelta de cualquier adjetivo, de repente, te llega una sorpresa que te deja heredando sensaciones.

Pero juega con ventaja. Sí. Lo tenía que decir. Aunque tengo, todavía que confirmar el hecho, todos sabemos que este hombre que se encorva para hablarnos desde ese más allá que es su altura, lleva en Estella siglos, desde siempre.

Bien pudo ser uno de los que ya estaban aquí cuando trajeron los otros el alfabeto de 22 letras, o traerlo él y quedarse para ponerle luz a la historia de Estella; puede ser que llegara desde el este caminando, con la cabeza cubierta por un capirote de otra tierra y se quedará aquí. Pudiera ser, porque nos conoce y nos recita la vida en sus canciones y nos mira y nos ve, como si nos mirara desde dentro de una flor llamada Estella y Lizarra con seis pétalos de más para esta estrella que nos pinta Agustín Satrústegui Maeztu, porque los carteros poetas también tienen dos apellidos: uno para escribir y otro para pintar.

Juan Andrés Pastor

— 

Nos hacemos a la vida,

 convivimos con la muerte,

nos lamemos nuestra herida,

esperamos mejor suerte.

¡Que aquella ilusión dormida

un sueño nos la despierte!

 La ilusión viene en huida.

 ¡Hay que aferrarla muy fuerte!

 Si por otros es sentida

 y logra comprometerte,

una ilusión compartida

 puede dar vida a lo inerte.   

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